En los últimos años, la falta de herramientas del urbanismo y la arquitectura tradicionales a la hora de tratar con situaciones en transición está dando lugar a nueva formas de trabajo. La construcción de estos nuevos métodos se basa, en la mayoría de los casos, en la articulación progresiva a través de la acción, poniendo más atención al valor del proceso y al aprendizaje del trayecto que a los objetivos fijados de antemano por un plan.
Aquellos ejemplos no institucionales que tres décadas atrás dieron las primeras respuestas al tejido industrial obsoleto, se han convertido en un referente para un urbanismo emergente. Aprendiendo de los excesos del modelo expansivo, los nuevos posicionamientos técnicos aspiran a incorporar a la práctica urbanística instrumentos que vinculen el uso, el diseño y la gestión de la ciudad construida.
[Segovia, Marrades, Rausell, Abeledo, 2015]
Superando la compartimentación, la orientación general es ahora el intercambio. Si a mediados del siglo XX el elitismo dio paso a la democratización de la cultura, ahora esa democratización pierde progresivamente la mentalidad paternalista, entendiendo lo social como verdadero motor de innovación.
[Segovia, Marrades, Rausell, Abeledo, 2015]
Todos estos espacios coinciden en señalar las pocas subvenciones que existen a nivel estatal, la desventaja en la que se sigue estando en este terreno con respecto a otros países europeos. Algunos, como los miembros de Cruce, ironizan al respecto matizando que “lo positivo de que te dejen a la intemperie, aunque a veces sientas que te ahogas, es que aprendes a buscarte la vida”.
[de Dios, 2002]
Si las cosas están como están es por culpa de todos, nosotros nos incluimos en esta crítica.
[Extracto de conversación con agentes del sector cultural independiente de Madrid, 2015]
De momento, nadie cuestiona el status quo.
[Extracto de conversación con agentes del sector cultural institucional de Madrid, 2015]