Generadores de vínculos con el espacio para desarrollar relaciones sociales más ricas con otros itinerarios de la ciudad gracias a la revitalización y revisualización de espacios vacíos.
[Extracto de conversación del sector cultural independiente de Madrid, abril 2015]
Quizá no derruir, pero sí crear brechas para comunicar de otra forma y que la creación artística sea mucho más libre y analizar otros espacios para ver qué es lo que falta: crítica, convicción, cercanía al arte, sinceridad, y cubrir esas carencias de una forma natural.
[Extracto de conversación del sector cultural independiente de Madrid, abril 2015]
Compartir la necesidad y el gusto por hacer uso del espacio público.
[Extracto de conversación del sector cultural independiente de Madrid, abril 2015]
Llevar a los lugares institucionales y a las redes ya establecidas de agentes culturales lo que se mueve en otros espacios, lo que no llega a pasar los filtros de la censura, que no de la calidad, porque eso tiene muy poco que ver con las políticas culturales.
[Extracto de conversación del sector cultural independiente de Madrid, abril 2015]
El espacio ya no puede concebirse como pasivo, vacío como no teniendo más sentido que ser intercambiado, consumido o suprimido.
[Lefebvre, 2013]
El concepto de espacio liga lo mental y lo cultural, lo social y lo histórico. Reconstruye un proceso complejo: descubrimiento, producción y creación.
[Lefebvre, 2013]
¿Cómo pasar, en primer lugar, de los espacios matemáticos (es decir, de las capacidades mentales de la especie humana, de la lógica) a la naturaleza, después a la práctica, y de ahí a la teoría de la vida social que se despliega presumiblemente en el espacio?
[Lefebvre, 2013]
El espacio en su totalidad –mental, físico y social– se aprehende trágicamente. Si hay centro y periferia, el centro posee su propia realidad trágica, la del sacrificio, la violencia y la explosión; también la periferia, a su manera.
[Lefebvre, 2013]
Habitar sería apropiarse del espacio; apropiarse del espacio consistiría, en consecuencia, en convertir el espacio (vivido) en lugar, adaptarlo, usarlo, transformarlo y verter sobre él la afectividad del usuario, la imaginación habitante; práctica creativa que afirma la ilimitada potencialidad humana al reconocerse en la obra creada, otorgando al espacio sus múltiples dimensiones perdidas: lo transfuncional, lo lúdico y lo simbólico. Por el habitar se accedería al ser, al al sociabilidad (el derecho a la ciudad, el derecho a la centralidad-simultaneidad) y el habitante rompería con el monólogo del urbanismo tecnocrático.
[Lefrebvre (prólogo de Emilio Martínez), 2013]
El espacio del placer, que sería el auténtico espacio apropiado, no existe aún. Algunos casos en el pasado dejan hueco a la esperanza; pero el resultado no parece corresponderse con el deseo.
La apropiación no puede confundirse con una práctica muy cercana pero claramente distinta: la desviación. Un espacio existente, que posea su finalidad (su razón de ser, que condiciona sus formas, funciones y estructuras) puede estar vacante y antojarse susceptible de ser desviado. Es decir, reapropiado para un uso diferente al original. Un caso reciente y célebre de reapropiación es el de Les Halles en París. Durante un breve período de tiempo (1969-1971), los Mercados centrales (Les hHalles), núcleo urbano destinado al aprovisionamiento, se transformaron en lugar de encuentro y de fiesta, centro lúdico para la juventud parisina.
La desviación y la reapropiación de los espacios tienen un gran sentido y pueden ser muy instructivos para la producción de nuevos espacios.
[Lefebvre, 2013]
La creatividad como recurso y el espacio como sujeto y contexto son elemento que se condicionan mutuamente y posibilitan el desarrollo de aquellas dinámicas construidas sobre el intercambio de información simbólica que generan transformaciones en la dimensión estética, emocional o espiritual de los individuos que componen una comunidad. Los espacios, su configuración y sus modos de gestión han estado siempre –de manera explícita o implícita– en el centro de los procesos culturales. La evolución histórica ha requerido una constante reformulación de los espacios según los modos, contemporáneos en cada casa, de creación, producción y distribución cultural.
[Segovia, Marrades, Rausell, Abeledo, 2015]
Las interpretaciones del término espacio público son altamente cambiantes según quién lo utilice, aunque por norma general se insiste en la concepción jurídica que señala al espacio de propiedad común o en la que, desde las cualidades de forma, se refiere a los espacios de libre acceso. Ambas descripciones hunden su raíz en el urbanismo, que bajo sus criterios normativos, delimita, distribuye y define el espacio público por oposición al espacio privado. La interpretación que aquí proponemos desborda esa idea de espacio público definido por el diseño y descrito según términos de propiedad para abarcar los vínculos sociales, culturales y políticos que realmente definen lo público.
[Segovia, Marrades, Rausell, Abeledo, 2015]
Como hace poco, las prácticas significantes que conciernen a las realizaciones de la lengua, se tomaron según los sistemas lingüísticos, hoy las prácticas espacializantes acaparan la atención tras haberse examinado los códigos y las taxonomías del orden espacial. Nuestra investigación pertenece a este “segundo” momento de análisis, que pasa de las estructuras a las acciones. Pero dentro de este conjunto tan vasto, solo consideraré las acciones narrativas. Permitirán precisar algunas formas elementales de las prácticas organizadoras de espacio: la bipolaridad “mapa” y “recorrido”, los procedimientos de delimitación o de “deslinde” y las “focalizaciones enunciativas” (es decir, el signo del cuerpo del discurso).
[De Certau, 1996]
Más que con cualquier categorización preestablecida, lo que hace público a un espacio se relaciona con el modo en que las personas lo usan.
[Segovia, Marrades, Rausell, Abeledo, 2015]
En los últimos años, la falta de herramientas del urbanismo y la arquitectura tradicionales a la hora de tratar con situaciones en transición está dando lugar a nueva formas de trabajo. La construcción de estos nuevos métodos se basa, en la mayoría de los casos, en la articulación progresiva a través de la acción, poniendo más atención al valor del proceso y al aprendizaje del trayecto que a los objetivos fijados de antemano por un plan.
Aquellos ejemplos no institucionales que tres décadas atrás dieron las primeras respuestas al tejido industrial obsoleto, se han convertido en un referente para un urbanismo emergente. Aprendiendo de los excesos del modelo expansivo, los nuevos posicionamientos técnicos aspiran a incorporar a la práctica urbanística instrumentos que vinculen el uso, el diseño y la gestión de la ciudad construida.
[Segovia, Marrades, Rausell, Abeledo, 2015]
Las nuevas formas sociales no son “inscritas” en el espacio preexistente. El espacio producido no fue ni rural ni urbano, sino resultado de su novedosa relación espacial
[Lefebvre, 2013]
Desde el momento en que no se toman en consideración esas relaciones inherentes a las cosas sociales, el conocimiento se extravía, mostrándose incapaz de constatar la indefinida e indefinible variedad de cosas. El conocimiento se pierde en las clasificaciones, en las descripciones y en definitiva en las fragmentaciones.
[Lefebvre, 2013]
La forma del espacio social es el encuentro, la concentración y la simultaneidad. ¿Pero qué reunión? ¿Qué es lo que se concentra? Todo lo que hay en el espacio, todo lo que está producido, bien por la naturaleza, bien por la sociedad –ya sea a través de su cooperación o mediante su conflicto-. Todo: seres vivos, cosas. Objetos, obras, signos y símbolos.
[Lefebvre, 2013]
Podemos decir que este espacio supone y propone una lógica de la visualización.
[Lefebvre, 2013]
Se trataría pues, en el horizonte, en el límite de lo posible, de producir el espacio de la especie humana, como obra colectiva (genérica) de esta especie, a semejanza de lo que se decía y todavía se dice “arte”, pero un arte que ya no tiene sentido referido al “objeto” aislado por y para la individualidad.
[Lefebvre, 2013]
Los espacios sociales se interpretan y/o se yuxtaponen. No son cosas que limitan entre sí, colindantes, o que colisionan como resultado de la inercia. Algunos términos como “capa” o “estrato”, no están desprovistos de inconvenientes. Las fronteras visibles (por ejemplo, los muros, las cercas en general) hacen surgir la apariencia de una separación entre esos espacios tanto en ambigüedad como en continuidad. El espacio de una “pieza”, de una habitación, de una casa, de un jardín, separado del espacio social por barreras y muros, por todos los signos de la propiedad privada, no es menos espacio social.
[Lefebvre, 2013]
El espacio social permite que tengan lugar determinadas acciones, sugiere unos y prohíbe otras. Entre estas acciones, unas remiten al universo de la producción, otras al del consumo (es decir, al disfrute de los productos). El espacio social implica múltiples conocimientos.
[Lefebvre, 2013]
La capacidad creativa es siempre la de una comunidad o colectividad, la capacidad de un grupo, de una fracción de clase activa, de un “agente” o “actuante”. Aunque el mandato y la demanda puedan ser funciones de distintos grupos, la atribución de la responsabilidad sobre la producción de un espacio no puede hacerse a un individuo o a una entidad, sino a una realidad social susceptible de investir el espacio, de producirlo con los medios y recursos a su alcance.
[Lefebvre, 2013]
Todo espacio social resulta de un proceso de múltiples aspectos y movimientos: lo significante y lo no-significante, lo percibido y lo vivido, la práctica y la teórica. En suma, todo espacio social tiene una historia a partir de esta base inicial: la naturaleza, original y única, en el sentido en que está dotada siempre y por doquier de características específicas (climas, sitio, etc.).
[Lefebvre, 2013]
Decidimos vaciarlo [el espacio] nosotros porque queríamos partir de ese concepto de acumulación, de basura, del desecho como una metáfora de la situación actual de la cultura y hacer emerger desde ese basurero todo el proceso creativo.
[Extracto de conversación del sector cultural independiente de Madrid, abril 2015]
No tenemos sede, siempre hemos ido de espacio en espacio. Nosotros lo definimos como permear espacios con goteras de arte y cultura.
[Extracto de conversación del sector cultural independiente de Madrid, abril 2015]
Culturalmente hay un sectarismo que entiende que la cultura tiene que estar ubicada en determinados lugares y no en otros.
[Extracto de conversación del sector cultural independiente de Madrid, abril 2015]
La gente permanecía, estacionaba aquí. Fue un choque importante respecto a qué es un espacio cultural, para qué está, para qué sirve y cómo debe funcionar.
[Extracto de conversación del sector cultural independiente de Madrid, abril 2015]
Cesión del espacio público a la gestión privada.
[Extracto de conversación del sector cultural independiente de Madrid, abril 2015]
Hay mucha gente que entraría a una galería a ver arte pero le da cosa porque no se considera parte de ese mundo (…) para eso rompimos con el cubo blanco y empezamos a buscar espacios totalmente diferentes.
[Extracto de conversación del sector cultural independiente de Madrid, abril 2015]
Te conviertes en protagonista (…) has roto con la cuarta pared y estás subiendo al escenario (…) Esa es otra de las filosofías del festival: que el público no sea un mero espectador (…) tenemos espacio para que haya improvisación (…) hay una programación coherente pero también hay espacio para que pasen cosas, para que surja la magia.
[Extracto de conversación del sector cultural independiente de Madrid, abril 2015]
La unión de espacios vacíos con la necesidad de generar actividades culturales. Porque hay muchos artistas que no llegan a las galería o que, simplemente, no es su ámbito.
[Extracto de conversación del sector cultural independiente de Madrid, abril 2015]
El taller es generoso.
[Extracto de conversación del sector cultural independiente de Madrid, abril 2015]
Generadores de vínculos con el espacio para desarrollar relaciones sociales más ricas con otros itinerarios de la ciudad gracias a la revitalización y revisualización de espacios vacíos.
[Extracto de conversación del sector cultural independiente de Madrid, abril 2015]